miércoles, 22 de enero de 2014

Acerca de tirar la correa...

Yo creo que el 99% de los perros ha tirado la correa en algún momento de su vida, y si de algo estoy segura es que ha sido sin mala intención.
En la mayoría de los casos los perros caminan tirando la correa simplemente porque no saben que podrían pasear de otra manera, siempre ha sido así, el humano toma la correa, el perro se pone feliz porque sabe lo que significa, a la hora de salir el entusiasmo manda y el perruno parte oliendo y mirando todo lo que esta a su paso, y la correa simplemente evita que se escape. Si a esto le sumamos el uso de arnés de paseo, que esta pensado para que los perros tiren cómodamente, el peludo ni siquiera imagina que tirar puede ser algo reprobable, y no entiende porque su humano anda de tan mal humor si el día está estupendo y hay tantas cosas lindas a su alrededor para disfrutar. No es un tema de madurez, o que se le vaya a pasar cuando deje de ser cachorro, ningún perro camina sin tirar la correa sin haberlo aprendido primero

Con el paso del tiempo, algunos peludos que tienen la suerte de ser mas perceptivos se dan cuenta que justo cuando se tensa la correa, el humano se molesta... y por iniciativa propia empiezan a evitar tirar la correa, es decir, aprenden solos... pero para el resto de la población canina el caminar sin tirar la correa seguirá siendo algo impensado a menos que su humano se lo enseñe conscientemente, y como el paseo continúa a pesar de los tirones, la acción de tirar se va reforzando a través del tiempo y mas le costará al perro cambiar ese hábito, no importa cuanto lo retemos, lo mas probable es que ni siquiera imagine que es por ir tirando, seguramente ya asumió que salir pone de mal genio a su humano y simplemente lo ignora y disfruta del paseo. O incluso peor, puede pensar que la fuente del malestar de su humano es el mismo e intentara alejarse para no molestar, dando como resultado que tire aún mas.

Así que como seguramente nuestro perro no es de los afortunados que aprendieron solos, sera nuestro trabajo enseñarle a caminar correctamente y dependerá de muchos factores el éxito de nuestra misión.

Lo mejor es quitarse esas ideas de dominancia antes de enseñar a nuestro peludo, la gran mayoría de los perros no tiene interés de dominar a nadie, simplemente no entienden lo que nosotros esperamos de ellos y por eso actúan de maneras que nos frustran, aunque no lo creamos ellos están aun mas frustrados porque lo que mas quieren es que estemos todos contentos y pasarlo bien, jamás van a buscar molestarnos solo por demostrarnos que "mandan". La mayoría de las actitudes que se le atribuyen al perro por dominancia no son mas que el resultado de una mala comunicación y el estrés del perro, pero no son porque quieran dominarnos.

Una cosa que les puede pasar es que estén tan entusiasmados que no se puedan controlar, puede que nuestro perro sepa exactamente como caminar, pero es tal su energía y su felicidad que no es capaz de hacerlo bien porque tiene demasiadas ganas de pasear, es difícil que nosotros de adultos podamos entender esa sensación pues hace mucho tiempo que nada nos entusiasma tanto, pero quizás podamos evocar esos momentos cuando chicos cuando llegábamos a la playa o piscina y solo queríamos ir a jugar en el agua, pero debíamos esperar a que nos pusieran bloqueador lo que era prácticamente una tortura y en algunos casos hasta una batalla que terminaba con un niño llorando y un padre enojado. Si tenemos un perro entusiasta, podemos prevenir su locura cansándolo antes de salir, para que tenga menos energía y logre controlarse.

Otra opción es que sean perros muy energéticos, así como la gente hiperactiva que no se logra quedar quieta, hay perros que quieren estar siempre en movimiento y si el ritmo del paseo que llevamos es muy tranquilo para ellos estarán moviéndose de un lado a otro y tirando la correa para avanzar mas, si es nuestro caso, es buena opción buscar instancias donde el perro pueda dar rienda suelta a esos impulsos, ir a excursiones o parques donde pueda correr, así le resulta mas fácil controlarse cuando pasean porque sabe que hay otras instancias en las que puede dar rienda suelta a su energía.

Hay casos mas delicados, como los perros con fobias o alto nivel de ansiedad o estrés, que van a tirar la correa porque se sienten mal, porque el paseo es algo intimidante para ellos y quieren que acabe pronto, o porque se sienten amenazados y creen que deben defenderse de las cosas y de los otros al rededor... Esos casos es mejor verlos con un especialista pues suelen deberse a causas mas complejas y es necesario abordar el origen antes de enseñar al perro como caminar correctamente para no agregar mas estrés a su vida.

Así que para poder enseñarles es importante tomar estos factores en cuenta y luego de eso idear una estrategia para que nuestro amigo entienda que es lo que esperamos de él, lo mas fácil es hacer una mezcla entre no reforzar los tirones, es decir, dejar de caminar en cuanto se tense la correa, e ir premiando cuando el perro camina bien. Si hacemos esto de manera constante la gran mayoría de los perros entenderá y a menos que sea demasiado energético o esté estresado, caminara relativamente bien en sus paseos habituales.

Los accesorios para ayudar en el aprendizaje de esta lección pueden ser una gran ayuda, pero son solo complementos, de nada servirán si no somos constantes y pacientes, y no solucionamos los problemas de fondo. Cada perro tiene necesidades distintas y si nuestro perro no esta bien o tiene tanta energía acumulada que le cuesta concentrarse difícilmente va a poder cumplir nuestras expectativas a la hora del paseo.

El arnés de pecho es un accesorio que gracias a su enganche anterior produce un desequilibrio en el perro que hace que tirar la correa deje de ser cómodo, cuando tira, su cuerpo se va hacia el lado y se desconcentra un poco. Esto suele bastar para que la mayoría de los perros deje de tirar como lo hacía en un principio, pero si no reforzamos esta buena conducta hay algunos perros que por aburrimiento o entusiasmo volverán a tratar de tirar. Es importante asegurarnos de que aprendió, y de que no se le olvida y para eso no hay nada mejor que los premios. Existe un numero reducido de perros que les da lo mismo el tipo de enganche y siguen tirando igual pese al desequilibrio, en estos casos el arnés solo sirve para poder manejarlos mas cómodamente, pero el perro no esta aprendiendo nada y debemos buscar otros metodos si queremos que entienda lo que queremos enseñarle.

El ronzal o cabestro es un collar que tiene una cinta que va por sobre la nariz, en estricto rigor es mas efectivo que el arnés pues cuando el perro tira, la cabeza se dirige hacia abajo por lo que mecánicamente le resulta imposible ir tirando, pero primero hay que enseñarle al perro a tolerarlo y hay perros que les molesta bastante y el período de acostumbramiento puede ser bastante largo. Personalmente nunca lo usé porque no me di el tiempo de enseñarle a mis perras, pero hay gente que no le ha resultado el arnés y que si ha logrado controlar a sus peludos con ayuda del ronzal, premios y paciencia. Para poder usarlo de manera correcta y efectiva debemos partir en casa, poniendo el ronzal por períodos muy cortos, ojalá hasta antes que intente sacárselo y ayudándonos de premios ir alargando ese tiempo hasta que el perro asocie tener puesto el ronzal con algo positivo y no intente sacárselo, y recién ahí comenzar a enseñarle a pasear.

Bueno amigos, espero que les sirva esta nota para pasear a sus peludos de mejor manera y entenderlos un poco mas. No pretende ser un curso completo, hay muchos métodos y cada perro tiene sus propias motivaciones, solo es un llamado de atención de factores que a veces pasamos por alto pensando que el perro simplemente nos quiere hacer rabiar. No olvidemos que el objetivo de tener un perro es ser felices y compartir, y los paseos son una manera mas de hacerlo y el momento donde nuestro amigo bota sus tensiones y se distrae, la idea es que sea agradable para todos. Probemos alternativas respetuosas con los peludos antes de pensar en los castigos, y si nuestro peludo aun así no aprende quizás necesitemos el apoyo de un experto, es posible que su "mal comportamiento" solo sea una manera de pedir ayuda porque algo mas le pasa.